Puente de Isabel II

Sustituyó en el siglo XIX a un viejo puente de barcas que existía en su lugar, constituyendo el puente de hierro más antiguo conservado en España.[6]​ La importancia estratégica de este enclave ha dado lugar a que tuvieran lugar en el antiguo puente de barcas dos batallas fundamentales cuando se ha intentado tomar la ciudad.En el siglo XVI, especialmente en su segunda mitad, en un momento en que los recursos económicos parecían estar disponibles, el cabildo municipal estudió varios proyectos para ejecutar un puente.A título de ejemplo se cita el proyecto elaborado en 1563 por Fabricio Mondente, en el que se ofrecía a realizar un puente de madera y hierro.En alguna ocasión las barcas se habían soltado generando un problema de costosa reparación.Tras uno de estos accidentes, el teniente general Tomás Muñoz redacta un informe en 1803 en el que sugiere que las barcas deberían anclarse siguiendo una trayectoria curva y que se debería de desviar parte de la corriente del río por otros cauces antiguos.[8]​ Como no había una piedra adecuada para ello en Andalucía, se propuso traerla en barco de lugares del norte, como La Coruña, Ferrol, Asturias, Santander, Castro-Urdiales o Bilbao.[9]​ En 1833 un ingeniero de la Dirección General de Caminos, Pedro Miranda, proyectó un puente colgante sobre el Guadalquivir en Sevilla que era similar al que él mismo había construido en Aranjuez.El ayuntamiento también acordó pedir al Estado la imposición de una tasa (pontazgo) para los caballos y los carruajes que hicieran uso de esa infraestructura.[11]​ El puente costaría 12 millones de reales, que se pagarían durante 25 años.En abril de 1844 el Ayuntamiento recibió la autorización para instaurar dicho pontazgo.[11]​ El dinero recaudado iría para pagar la construcción del puente, pero, mientras esta construcción no empezase, se destinarían los fondos a la Diputación Provincial para costear la carretera de Huelva.El puente parisino fue demolido a comienzos del siglo XX y sustituido por uno de hormigón.El Puente de Triana sería más grande que el francés, ya que la anchura del Sena en aquel lugar era solamente dos tercios de la del Guadalquivir a su paso por Sevilla.[14]​ En abril de 1846 Bernadet dejó la construcción y quedó Steinacher como contratista único.En 1851 se hizo cargo de la obra el ingeniero Canuto Corroza, que realizó algunas modificaciones leves.La inauguración tuvo lugar con una procesión que empezó en la parroquia trianera de Santa Ana.Para su apertura al público se esperó a una ordenanza que regulase el tráfico.[27]​ Al principio el tranvía era de tracción animal, pero posteriormente la sociedad The Seville Trainways Company, Ld.decidió poner tranvías eléctricos y, en 1897, el ingeniero Juan Manuel Zafra llevó a cabo la instalación de los postes para que pudieran pasar por el puente.[29]​ Se encargó un estudio al ingeniero José María Castrillo, que finalizó en 1903.[29]​ El proyecto definitivo fue encargado en 1916 al ingeniero Félix Rodríguez Doreste.de la ayuda americana a España para sustituir los elementos metálicos en mal estado, renovar la losa de hormigón del tablero y poner un nuevo pavimento.Tras estos hechos el Ministerio de Obras Públicas encargó un proyecto para conservar el puente al ingeniero onubense Juan Batanero, que colaboró con un equipo en el que estaban también Ramiro Rodríguez Borlado y Rafael y Carlos Martínez Lasheras.La solución consistió en reemplazar el tablero original por uno nuevo autoportante, compuesto por una losa ortótropa que se apoya en dos vigas cajón, las cuales descansan directamente sobre las pilas y los estribos, de forma que actualmente los pilares, arcos y anillos se conservan solo como elementos decorativos, sin cumplir ninguna función estructural.[39]​ La empresa Cimentaciones Especiales S.A. llevó a cabo los estudios necesarios en enero de 1975.Con la autonomía andaluza, la gestión del puente pasó a la Junta de Andalucía.Esto provocó que hubiera entradas al puente a través de unas escaleras a la entrada del mercado de abastos de Triana y se crearon también unas escaleras para acceder al puente desde la calle Betis del mismo barrio.Para ensanchar la avenida trianera se derribó la capilla de la Virgen del Carmen que había junto al mercado.[41]​ Por esto, el Ayuntamiento encargó una nueva al arquitecto Aníbal González en 1924.
Puente del Carrousel de París (1834), hoy desaparecido, que sirvió como modelo para construir el de Isabel II en Sevilla.
El puente de Triana , de García y Rodríguez ( Blanco y Negro , 7 de marzo de 1903)