Los anuncios virales toman a menudo la forma de divertidos videoclips o juegos Flash interactivos, imágenes, e incluso textos.
El marketing viral, como medio de comunicación, permite que los usuarios estrechen relaciones y conversen entre ellos.
[6] La tarea más difícil para cualquier compañía consiste en adquirir y retener una gran base de clientes.
La hipótesis es que si esa publicidad llega a un usuario "sensible" (es decir, interesado en el producto ofrecido por Hotmail, el correo gratuito), ese usuario "se infectará" (es decir, se dará de alta con una cuenta propia) y puede entonces seguir infectando a otros usuarios sensibles.
Por ejemplo, se considera una campaña que empieza enviando un mensaje a 100 usuarios.
Así que la campaña final habrá supuesto el coste de enviar el mensaje a esos 100 usuarios, y el resto (357 en este ejemplo concreto) serán usuarios que han recibido la campaña de marketing a través de métodos virales, normalmente sin coste para la compañía.
Evidentemente este es el caso para campañas con tasas de reproducción inferiores a 1.
En ese caso, la campaña tiene la capacidad teórica de continuar hasta que toda la población "sensible" haya recibido por lo menos una copia.