Se trata de una prefectura apostólica latina, inmediatamente sujeta a la Santa Sede.
También se convirtió en una importante base militar y muchos colonos llegaron al área.
Todos los misioneros extranjeros fueron expulsados de China comunista.
En el período de 1966 a 1976 la Revolución Cultural se ensañó especialmente contra la religión, destruyéndose numerosas iglesias.
[5] En una nota oficial fechada el 10 de julio, la Santa Sede confirmó las sanciones canónicas para Joseph Yue Fu-sheng y los obispos que participaron en la ordenación episcopal ilegítima.
En la comunicación publicada se expresó que el papa asignó al obispo Joseph Yue Fu-sheng una tarea pastoral diocesana como obispo de Heilogjiang, teniendo debidamente en cuenta las situaciones locales particulares y complejas.