Se suele confundir por su similitud tanto en forma como en peso con el bacalao (Gadus morhua) o el abadejo (Pollachius pollachius), y a veces suele sustituir culinariamente a alguno de ellos.
Rara vez cambia de climas y es muy poco frecuente encontrarlo en latitudes más bajas.
En España rara vez se lo ve en las lonjas y si así fuera corresponderían a las de las costas del norte.
Es un pez activo que suele vivir en pequeños grupos, en aguas a una profundidad de 200 metros.
Existen dos sinónimos reconocidos por la FAO[1] No obstante en la literatura se mencionan otros: Su uso principal es para la alimentación humana.