Un pólder es una palabra neerlandesa que designa las superficies terrestres ganadas al Mar del Norte.
Esta técnica se desarrolló por primera vez en el siglo XII,[1] en la región de Flandes.
Los neerlandeses se han convertido en auténticos maestros en el arte de conquistar las tierras situadas a orillas del mar, que se hallan a su mismo nivel o inferior, para darles de esta forma un aprovechamiento agrícola.
[3] Por extensión, el término «pólder» se aplica a todos los terrenos húmedos (como marismas, lagos y llanuras aluviales) que han sido desecados con fines agrícolas, industriales o portuarios.
Algunos animales excavan túneles en la barrera, permitiendo que el agua se infiltre en la estructura; la rata almizclera es conocida por esta actividad y cazada en algunos países europeos por ello.
Los pólderes suelen encontrarse, aunque no exclusivamente, en deltas fluviales, antiguos pantanos y zonas costeras.
Un ejemplo es la inundación de los pólderes a lo largo del río Yser durante la Primera Guerra Mundial.
Al abrir las compuertas con marea alta y cerrarlas con marea baja, los pólderes se convirtieron en un pantano inaccesible, lo que permitió a los ejércitos aliados detener al ejército alemán en la batalla del río Yser.
Los pólderes creados como parte de Zuiderzee Works incluyen Wieringermeerpolder (1930), Noordoostpolder (1942) y Flevopolder (1956-1968).
Varias ciudades de la región del Valle del Paraíba (en el estado de São Paulo) tienen pólderes en terrenos reclamados a las llanuras aluviales en torno al río río Paraíba do Sul.
El sistema alemán Deichgraf era similar al holandés y es ampliamente conocido por la novela de Theodor Storm El jinete del caballo blanco.