A diferencia de otras modalidades, la plaza no está actualmente homologada por la Federación Internacional de Palota Vasca, aunque formó parte del programa del I Campeonato del Mundo de Pelota Vasca, disputado en San Sebastián en 1952.
Esta modalidad se practica de modo competitivo casi exclusivamente en Francia, aunque frontones homologables a este tipo se encuentran, por su sencillez, en otros lugares del mundo.
La plaza libre suele ser un espacio no cubierto, compuesta solamente por un pared frontal (frontis).
Las plazas más cortas permiten solo la disputa de las especialidades que se juegan también en la modalidad de trinquete o fronto corto, como la mano o la paleta, siendo necesaria una cancha más larga para especialidades como la grand chistera, el rebote o el joko garbi.
La Federación Francesa de Pelota vasca tiene reglamentadas las dimensiones y características que debe tener una plaza libre para las competiciones oficiales que se disputen en esta modalidad.