Respecto al río Ebro la plataforma ha denunciado las consecuencias que nuevos trasvases supondrían para el parque natural del delta del Ebro.Durante su trayectoria, la Plataforma ha rehusado y solicitado la paralización del trasvase de 1050 hectómetros cúbicos, contemplado en la Ley 10 de 5 de julio de 2001 (BOE, número 161, de 6/07/2001) del Plan Hidrológico Nacional mediante el cual se hubieran derivado aguas hacia el norte (Barcelona-Tarragona) y hacia el sur del río Ebro (Castellón, Valencia, Alicante, región de Murcia y Almería).Esta ley fue modificada por la ley 11/2005 de 22 de junio (BOE, número 149, de 23/06/2005) en la cual se exponen las deficiencias ambientales y económicas del proyecto.[1] En la lucha contra la detracción de aguas de la cuenca del Ebro el movimiento antitrasvasista fue capaz de articular una potente oposición multiautonómica (social y científica) y de convocar una de las mayores manifestaciones celebradas en España como la que tuvo lugar en Madrid el 10/03/2001[2] entre muchas otras.Dentro de la PDE se agrupan todo tipo de entidades y entre ellas hay que destacar la Coordinadora Antitrasvase entidad pionera en la denuncia de los perjuicios ambientales, sociales y económicos que ha supuesto, para las Tierras del Ebro, el minitrasvase del Ebro hacia Tarragona y en la oposición a los intentos de macrotrasvases proyectados por el que fuera ministro José Borrell (PSOE).