Plasma fresco congelado

[1]​ En raras ocasiones pueden ocurrir reacciones alérgicas, coágulos de sangre o infecciones.[2]​ El plasma entró por primera vez en uso médico durante la Segunda Guerra Mundial.PF24 tiene niveles ligeramente más bajos de Factores V y VIII que PFC.[10]​ Las indicaciones para el uso de PFC incluyen lo siguiente: No se recomienda PFC a menos que haya un sangrado en curso o que haya un problema significativo de coagulación sanguínea.[13]​ El plasma descongelado está hecho de PFC o PF24 y se mantiene refrigerado (a 1-6 °C).[10]​ Los riesgos del PFC incluyen la transmisión de enfermedades, las reacciones anafilactoideas y un volumen intravascular excesivo (sobrecarga circulatoria asociada a la transfusión (TACO)), así como la lesión pulmonar aguda relacionada con la transfusión (TRALI).El uso del plasma y sus productos ha evolucionado durante un período de cuatro décadas.El tratamiento alternativo seguro y efectivo a menudo existe, por lo que el PFC ya no es la terapia de elección en muchas afecciones.Para el soporte nutricional, se encuentran disponibles soluciones de aminoácidos y dextrosa.
Warfarina
Albúmina