Dado que recibió su formación científica en el extranjero, que publicó sus trabajos científicos en inglés, francés o alemán y que vivió principalmente en París, Chijachov no puede ser plenamente considerado un científico ruso, pero la ciencia rusa le debe reconocimiento por su exploración esencial de la geología y la geografía de Altái.
Viajando a través de Altái meridional, Chijachov alcanzó territorios hasta entonces sin descubrir.
Investigó también las montes Sayanes, sobre los que se contaban las historias más fantásticas, no solo en Europa Occidental, sino también en Rusia.
Aprovechó su estancia de dos años allí para estudiar turco y, a continuación, dejando el servicio diplomático, realizó durante 1847-1863 una serie de expediciones en Asia Menor, en las que hizo amplias investigaciones científicas y colecciones.
Los resultados fueron publicados por Chijachov en una obra enorme, Asie Mineure: Description physique, statistique et archéologique de cette contrée.
Después de completar sus investigaciones de Asia Menor y habiendo llegado a la vejez, Chijachov terminó sus grandes viajes y expediciones pero no detuvo el trabajo científico.