Todas las especies se alimentan de peces y capturan a sus presas buceando desde la superficie.
No existe un dimorfismo sexual evidente; sin embargo, los machos son de media más grandes y pesados que las hembras.
[5] En su plumaje juvenil, los cormoranes son de color gris-marrón, aunque la parte inferior puede ser algo más pálida.
Si hay una mata de pelo o un gorro, éstos son claramente alargados en el plumaje, al igual que cualquier pluma decorativa en otras partes del cuerpo.
A menudo, el color general del plumaje se vuelve más brillante y fuerte.
El esqueleto denso y poco neumático es mucho más pesado que el de los pelícanos afines.
Las alas son relativamente cortas, ligeramente redondeadas y, por lo general, se vuelven fuertemente anguladas durante el vuelo.
[4] Para volar, los cormoranes tienen que recorrer una larga distancia sobre la superficie del agua antes de poder despegar.
El aterrizaje se realiza en posición vertical, con la cola desplegada y los pies estirados hacia delante.
[4] Aquí buscan lugares elevados como rocas, ramas o postes de vallas y, en el caso de las especies costeras, a menudo cornisas en acantilados escarpados; algunas especies también se posan en árboles o cables eléctricos.
Sin embargo, debido a su estructura, las plumas absorben agua, lo que reduce aún más la flotabilidad.
[4] Cuando los cormoranes salen del agua y se dirigen a un lugar de descanso, primero sacuden sus plumas.
Su principal dieta son los caimanes recién nacidos[4] Las partes no digeribles, como los huesos y las escamas, se regurgitan una vez al día en forma de gránulos.
Una hembra que se une al macho cortejador es ahuyentada o aceptada como pareja.
Las crías están desnudas e indefensas al principio y no llevan un pelaje oscuro hasta después de una semana.
Nacen a intervalos más largos; la última cría nacida no suele ser lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a los hermanos mayores al alimentarse y casi siempre muere al cabo de unos días.
Cosmopolita, con la mayor diversidad en las regiones tropicales y templadas, observable incluso en las regiones del sur (Tierra del Fuego), en el Ártico y en la Antártida, los cormoranes frecuentan extensiones de mar abierto, tanto en las costas como en el interior.
Si bien esta técnica se sigue utilizando para la pesca en China, en Japón no es más que un atractivo turístico , como en la localidad de Gifu en la prefectura del mismo nombre donde se realiza de mayo a octubre.
Durante mucho tiempo, la pesca del cormorán ha sido una actividad importante en Japón, como lo destacan las múltiples alusiones en los ideogramas utilizados en los apellidos y ciertas expresiones.
En ciertas localidades de China, como en Guilin, en las orillas del río Li o en el lago Erhai, se utiliza el cormorán para la pesca.
Se le ata un cordel en la parte inferior del cuello de forma que pueda capturar un pez, pero no tragarlo.
Del Mioceno, por ejemplo, nos han llegado Nectornis miocaenus y Phalacrocorax littoralis, ambos de Europa.
Desde el Plioceno (5,33 a 1,8 millones de años), ya se conoce al cuervo común, una especie que sigue viva en la actualidad.