También lo fueron sus hermanos Jaume, Francesc y Joan.
Cultivaron los hermanos Serra el estilo italo-gótico, de influencia en especial sienesa, como era por otro lado típico del siglo XIV catalán.
Realizan figuras menudas, estilizadas, de ojos rasgados y boca pequeña.
Se interesó más por el colorido que por los conceptos espaciales.
A Pere Serra se le atribuye: Colaboró con sus hermanos en la realización del retablo del monasterio de Sigena (Huesca), hoy en el Museo Nacional de Arte de Cataluña en Barcelona.