Pedro de Aragón (1275-1296)
Guillerma poseía un inmenso patrimonio, más de trescientas caballerías y enormes latifundios.En su tiempo fue la ricahembra más poderosa del reino de Aragón.Algunas fuentes señalan no obstante, que los restos del infante Pedro fueron trasladados años después de su muerte al Monasterio de Poblet.No obstante, esta versión no ha podido ser respaldada por pruebas arqueológicas, ya que en Poblet no se tiene constancia de haber sido depositados allí los restos del hijo menor de Pedro III de Aragón.Es posible, no obstante, que en realidad sus despojos sí hubieran sido trasladados a Poblet y que en la actualidad, como tantos otros, se encuentren desaparecidos, dispersos o mezclados con los de otras personas reales que allí recibieron sepultura, todo ello a causa de los destrozos causados al Monasterio de Poblet en 1835, durante la Desamortización de Mendizábal y las Guerras Carlistas.