Pedro de Castro y Quiñones

En 1558, estando todavía en la Corte le fueron concedidos por el papa Paulo IV el beneficio de Vezdemarbán y tres más que sumaban cuantiosas rentas y en 1560 fue nombrado arcediano de Saldaña.

Este evento consolidó su legado con la fundación de la Abadía del Sacromonte.

En 1600, organizó un Concilio Provincial que calificó las reliquias como auténticas y dignas de culto.

En Granada, su apoyo a esta devoción se consolidó a través de los célebres descubrimientos en el Sacro Monte, aunque algunos de estos hallazgos fueron condenados más tarde por Roma.

Este fervor por la Inmaculada perduró y se fortaleció durante su pontificado en Sevilla, donde promovió activamente el movimiento inmaculista, lo que llevó a la ciudad a emitir un voto público en 1617 en defensa de este misterio.

Pedro de Castro Vaca y Quiñones, grabado calcográfico firmado por Juan Ruiz Luengo en Granada, 1740, ilustración de Mystico ramillete, historico, chronologyco, panegyrico, texido de las tres fragrantes flores del nobilissimo antiguo origen, exemplarissima vida, y meritissima fama posthuma del ... Sr. Don Pedro de Castro Vaca y Quiñones de Diego Nicolás de Heredia Barnuevo , Granada, 1741.