Pedro Alfonso de Castilla
[1][2][3] Apenas existen datos sobre su vida,[a] pero sí hay constancia de que en 1359, y cuando tenía catorce años de edad, fue asesinado en Carmona junto con su hermano Juan Alfonso por orden del hermanastro de ambos, el rey Pedro I de Castilla.[16] Y conviene señalar que de la relación amorosa entre Alfonso XI y Leonor de Guzmán nacieron diez hijos, aunque en el momento de la muerte del monarca sólo quedaban con vida ocho de ellos.[17] Y González Crespo añadió que a la muerte de Alfonso XI sus hijos ilegítimos quedaron:[18]En 1359 Pedro Alfonso de Castilla y su hermano Juan Alfonso fueron asesinados en Carmona, donde se hallaban presos, por orden de su hermanastro Pedro I de Castilla,[19] y la ejecución fue llevada a cabo por el ballestero Garcí Díaz de Albarracín,[20][21][22][23] que había tomado parte también en el asesinato del maestre Fadrique Alfonso de Castilla en 1358.[20][24] En el momento de su muerte Pedro Alfonso tenía catorce años de edad,[3] y su hermano Juan Alfonso diecinueve,[b] y en la Crónica del rey Don Pedro, como advirtió Luis Vicente Díaz Martín,[20] se describieron estos hechos del siguiente modo:[25] Fue sepultado, al igual que su hermano Juan Alfonso, en la catedral de Astorga, según afirmó el cronista Rodrigo Méndez Silva.[26] Sin embargo, otros autores, como Ricardo del Arco y Garay, no mencionaron nada sobre ese enterramiento.