Entre 1907 y 1909 trabajó en el estudio de Jan Kotěra.
En 1911 se unió al Grupo de Artistas Plásticos (Skupina Výtvarných Umělců) y comenzó a trabajar en estilo cubista, como se denota en la villa Jakubec en Jičín (1911-1912) y la villa Drechsel en Pelhřimov (1912-1913).
Entre 1911 y 1914 publicó diversos ensayos en la revista Umělecký měsíčník (Mensual artístico), en los que expuso una teoría expresionista de la arquitectura cubista, que veía como una lucha espiritual con la materia inerte.
[1] Tras la Primera Guerra Mundial y la independencia de Checoslovaquia inició con Josef Gočár la búsqueda de un estilo arquitectónico nacional checo, que se plasmó en el llamado «rondocubismo», que incorpora formas redondeadas y multicolores procedentes de la decoración vernácula bohemio-morava,[2] como evidencia en el crematorio de Pardubice (1921-1923) y el palacio Adria en Praga (1922-1925, con Josef Zasche).
[3] En 1932 se encargó de la planificación general de la exposición Werkbundsiedlung celebrada en el barrio de Baba en Praga, donde se construyeron diversas viviendas diseñadas por dieciocho arquitectos, todos checos excepto el neerlandés Mart Stam.