Los palillos, un par de pequeños palos rectos de similar longitud, son los utensilios tradicionales usados para comer en Asia oriental (China, Japón, Corea del Norte, Corea del Sur y Vietnam), así como en Tailandia, donde están limitados solo a las sopas y los fideos desde que el rey Rama V introdujera en el siglo XIX los cubiertos occidentales.
En el palacio imperial chino se usaban palillos de plata para detectar veneno en las comidas reales.
La palabra china actual para los palillos es Kuài Zi (筷子) o Kuài'er (筷兒), que se puede traducir aproximadamente como «ligero [y] pequeño bambú».
Sin embargo, esta no fue realmente la denominación original del término primigenio, siendo justamente el hanzi zhù (箸), el señalado para nombrar al instrumento culinario.
Con el paso de los siglos y el tabú establecido en torno a este último hanzi, se comenzó a utilizar la forma kuài (筷), que ya únicamente quedaría vigente con pleno uso en países como Corea, Japón y Vietnam, junto con zonas del sureste de China, en las que aún hoy se utiliza zhù (箸), como en el caso del dialecto mǐn nán (閩南語), al sur de la actual Fújiàn (福建).
Estos palillos tienen una longitud de 30 centímetros (12 pulgadas) o más y se pueden unir con una cuerda en la parte superior.
[4][5] En Laos, Myanmar, Tailandia y Nepal los palillos generalmente se utilizan únicamente para consumir fideos.
Truco: Para un manejo más fácil al principio, sujetar los palillos por su punto medio, como haría un niño.
Si se tiene destreza, sujetar los palillos por los extremos superiores para un mayor alcance y aspecto más adulto.
Para ello, sujétense los palillos verticales con uno de los extremos tocando ligeramente la mesa, y empújense suavemente hacia abajo o déjeselos resbalar entre los dedos hasta que queden alineados.