Paihuano

Su etimología es incierta, no obstante, la composición de la palabra Paihuano tiene similitudes con otros poblados actuales o antiguos que comienzan con la sílaba pai- dentro del norte chico (por ejemplo, Paipote, Paycandalme).

Durante la Colonia se le reconoce como "el interior de Elqui", acentuado por su condición de penetraciones en el macizo andino sin paso ultramontano, como ocurre con el Valle del Río Turbio, lo cual le imprime un sello de particular distinción al asegurar el traspaso familiar en un reducido núcleo que a su vez mantiene interrelación y proyecta frondosa genealogía que aún perdura sin alteraciones.

Sus destilerías, con numerosas bodegas excavadas en los faldeos de las montañas o de algún cordón menor, generan ponderados vinos y claretes, mismos afanes que se acentúan en la segunda mitad del siglo XIX cuando el pisco toma forma e irrumpe en el mercado nacional, agregándose a ello los productos secos, siendo de especial predilección la pasa sin pepa que se vinculaba a esa tierra como algo propio.

[9]​ Además, la comuna posee diversos cuerpos de agua, entre los que se destacan la laguna Dragon.

Y en medio de esos majestuosos cerros no existen los volcanes, quizás porque no fue necesario, ya que al nacer Gabriela Mistral, Montegrande, su pueblo de primera infancia, fue el estallido mágico, constante y universal.

Monumento a Gabriela Mistral en la localidad de Montegrande.
Trazado simplificado de los ecosistemas y cuerpos de agua presentes en la comuna de Paiguano.