Su nombre significa Sonido de Cuernos; también es conocido como Araw en sindarin.
Junto con Yavanna y Ulmo no abandonó del todo la Tierra Media cuando los Valar fueron expulsados por Melkor al comenzar las Edades de los Árboles y continuó frecuentándola.
Para evitar sus viajes, Melkor levantó las Montañas Nubladas en los límites orientales de Eriador.
De esta forma, descubrió junto al lago Cuiviénen a los Elfos que recién habían despertado.
Fue así como Oromë descubrió a los Elfos y aquellos que creyeron en las mentiras de Melkor huyeron y no se les volvió a ver más.