Operación Faustschlag

Los bolcheviques se hicieron con el poder en Rusia durante la Revolución de Octubre y anunciaron que el país abandonaba la contienda.

[5]​ Esto resultaba inaceptable para los alemanes, que ya estaban transportando divisiones al frente occidental.

[1]​ Las divisiones austrohúngaras y alemanas avanzaron más de ciento cincuenta kilómetros en una semana, sin encontrar resistencia destacable.

[6]​ El rápido avance alemán se denominó «guerra ferroviaria» (der Eisenbahnfeldzug) por el uso que hicieron los ejércitos invasores de las líneas férreas rusas para desplazarse.

[9]​ El 22 de febrero, el general Hoffmann anotó en su diario: Trotski regresó a Petrogrado mientras se verificaba el avance enemigo.

[13]​Parando su marcha el 8 de mayo cuando llegan a Rostov del Don, que ocupan aliados con el atamán cosaco Piotr Krasnov.

Los alemanes continuaron sus operaciones militares también en el Cáucaso y Finlandia; en esta sus fuerzas colaboraron con la Guardia Blanca finlandesa en la guerra civil.

[6]​ Según el tratado, todas las bases navales rusas del Báltico a excepción de Kronstadt fueron entregadas a los Imperios Centrales; los buques de la Flota del Mar Negro destinados en Odesa debían desarmarse y permanecer en puerto.

[15]​ La rendición alemana les permitió a los soviéticos tratar de recuperar los territorios perdidos.

Soldados alemanes en Kiev en marzo de 1918.
Territorios ocupados por los Imperios Centrales durante la Operación Faustschlag y como consecuencia de esta.