Oliverio Castañeda de León

Su trayectoria en el movimiento estudiantil universitario registró un rápido ascenso, dados su carisma y capacidad de liderazgo.

En 1976 surgió el grupo estudiantil FRENTE en la Universidad de San Carlos, que arrasó por completo con todos los puestos de elección estudiantiles; sus dirigentes eran en su mayoría miembros de la Juventud Patriótica del Trabajo (JPT), el ala juvenil del Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT),[1]​ el partido comunista guatemalteco que había funcionado en la clandestinidad desde 1954.

[1]​ Al iniciar su período, Saúl Osorio fundó el semanario Siete Días en la USAC que informaba sobre las actividades de la Universidad y denunciaba constantemente la violación a los derechos humanos, en especial la represión contra el movimiento popular, además de hacer públicos los movimientos revolucionarios en Nicaragua y El Salvador.

Ahora bien, FRENTE tenía que enfrentarse con la izquierda radical, representada en ese entonces por el Frente Estudiantil Revolucionario "Robin García" (FERG), que surgió durante la marcha del Primero de mayo de 1978.

A sus miembros no les interesaba trabajar dentro de un marco institucional y nunca pidieron permiso para sus manifestaciones o acciones.

En 1978 por ejemplo, Osorio Paz y otros universitarios recibieron amenazas por su abierta oposición a la construcción de un oleoducto interoceánico que cruzaría el país para facilitar la explotación petrolera.

Luego, un aumento a la tarifa del transporte urbano y la huelga de los pilotos del servicio urbano colmó la paciencia de los ciudadanos y el rechazo al Presidente llegó al máximo.

El gobierno podía ver la inminente posibilidad que los rebeldes guatemaltecos también aprovecharan la movilización popular en la ciudad.

Esta decisión no fue acatada y la mayoría de los dirigentes se integró a la marcha.

La famosa frase final de su discurso -«Ellos pueden matar a nuestros dirigentes, pero mientras haya pueblo, habrá revolución»- fueron trágicamente visionarias.

Quince días después del asesinato de Oliverio Castañeda, fue desaparecido su sucesor, Antonio Ciani García.

[1]​ En los siguientes 18 meses recibieron amenazas casi todos los dirigentes estudiantiles y profesores universitarios con vinculaciones políticas (incluso con los partidos legales).

A veces la amenaza fue de forma muy sutil e indirecta, transmitida por un conocido, mientras que otras personas fueron abiertamente presionados para salir del país.

Ese mismo día, a pocas horas, fue acribillado el dirigente estudiantil y sindical Ricardo Martínez Solórzano.

Junto a Fuentes Mohr fueron los más destacados miembros de la oposición política legal.

Hasta 1979 el Comité Central del clandestino Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT) había considerado que el FUR podría convertirse en el instrumento para participar legalmente en el proceso electoral y buscar el poder de esa forma.

Casi todo el contenido de su órgano oficial, Siete Días en la USAC, fue una constante crítica al gobierno.

Cuando los espacios políticos fueron cerrados, una buena parte del movimiento actuó en la clandestinidad, para salvarse y seguir la lucha de una forma más adecuada a las condiciones.

Sin embargo, los miembros del movimiento popular no estaban preparados para enfrentarse al Estado por la vía violenta.

Entrada al Pasaje Rubio sobre la 6a. avenida de la zona 1. En este lugar fue asesinado Castañeda de León el 20 de octubre de 1978.