Octavia Estelle Butler
[5] De acuerdo con la Norton Anthology of African American Literature, Octavia fue «una niña introvertida e hija única en un hogar estrictamente baptista» y «pronto se aficionó a revistas como Amazing, Fantasy and Science Fiction y Galaxy, leyendo todos los clásicos de la ciencia ficción».[8] «Comencé a escribir mis historias cuando tenía doce años, estaba viendo una mala película de ciencia ficción titulada Devil Girl from Mars y decidí que podía escribir una historia mejor.Finalmente la abandonó y comenzó a estudiar escritura en la Universidad de California en Los Ángeles.La autora se describe a sí misma como una «cómoda ermitaña asocial en medio del pesimismo de Seattle, y si no tengo cuidado, una feminista, una negra, y por último, baptista, con una combinación imposible de ambición, pereza, inseguridad, certidumbre e impulso espontáneo».[15] En 1974 comenzó la serie Patternist con la novela Patternmaster (supuestamente comenzada con la historia que había iniciado viendo Devil Girl from Mars), que se convirtió en su primera novela en 1976 (aunque ocuparía el quinto lugar en la serie Patternist).El personaje masculino, Doro inicia un programa de crianza para crear descendientes con poderes psíquicos como alimento y compañeros potenciales.Tanto Doro como Anyanwu, a pesar de sus diferencias terminan necesitándose mutuamente, pues son los únicos seres inmortales del mundo.[cita requerida] En 1979 publicó la novela Parentesco (Kindred), que utiliza los viajes en el tiempo para explorar la esclavitud en los Estados Unidos, En esta historia, Dana, una mujer afroamericana, es inexplicablemente transportada desde del año 1976 en Los Ángeles a Maryland a principios del siglo XIX.Los Oankali son mercaderes biológicos, que se sienten impulsados a compartir genes con otras especies inteligentes.Juntos Oankali y humanos son forzados a entenderse para poder recrear una biología mixta que les permita sobrevivir, unos al holocausto y otros a su eterno viaje en busca de nuevas biologías.Además, la novela continua con el tema de La parábola del sembrador con la diversidad como imperativo biológico.Afirma en el prefacio que odia los relatos cortos y prefiere el formato de la novela.Octavia Butler utiliza la ciencia ficción especulativa para explorar temas sociales antiguos y modernos.Su objetivo es proporcionar una beca anual para personas de color que se dediquen a escribir; recibe solicitudes en inglés en diciembre del año precedente.