De este modo, los creadores son olvidados ("obliterados") y el concepto pasa a ser parte del conocimiento común (es "incorporado").
Merton introdujo también la contrapartida menos conocida de este concepto, "adumbramiento" ("adumbrationism"), es decir, la atribución de conocimientos, ideas o analogías ausentes en las obras originales.
[2] En el proceso de "obliteración por incorporación", tanto la idea como su formulación son olvidados debido al uso prolongado y generalizado, y entran en el idioma cotidiano (o al menos en el lenguaje de una determinada disciplina académica), dejándose de atribuir a su creador.
Allan Chapman señala que la obliteración por incorporación a menudo afecta a personas famosas, cuya atribución se considera como obvia e innecesaria, lo que conduce a su exclusión de las citas, incluso si ellos y sus ideas han sido mencionados en el texto.
Muchos términos y frases son tan sugerentes que rápidamente sufrieron el destino de la obliteración por la incorporación.