Ganaron todos los partidos camino a la final, marcando 39 tries e imponiendo un récord aun imbatible de la mayor victoria: 145–17 contra Japón.
Pero en la final del torneo y el clásico más importante de la historia; todo cambió ante los Springboks.
El equipo es considerado el subcampeón más fuerte en la historia del campeonato, de la era aficionada al menos.
Se reveló que la mafia china de Sudáfrica, impulsada por apuestas, utilizó una empleada del hotel llamada Suzie para alterar el té y café.
En 1995 los jugadores kiwis no dijeron nada por respeto a la nueva Sudáfrica, pero el entrenador Mains ordenó una investigación (mantenida en secreta para el público) que reveló la identidad de Suzie y confirmó la intoxicación en varios jugadores, entre ellos Wilson.