En Gran Bretaña, el Police Procedural tiene una larga historia, paralela e incluso anterior a la que el género tuvo en Estados Unidos.
Tanto ha sido así que algunos autores, como Henry Wade, se volcaron ya en los años treinta a esta variante del policial.
Con toda notoriedad, el género de la policía procesal se ha extendido más allá del medio ambiente anglosajón.
Por su parte, en Suecia y a partir de 1965, se publicó una serie de diez novelas policíacas escritas por Maj Sjöwall y Per Wahlöö, en donde es protagonista el comisario Martin Beck (primera novela, Roseanna).
Las investigaciones sobre los crímenes son llevadas a cabo en colaboración con los miembros del Alto Comisionado de Estocolmo, de entre los cuales Melander y Kollberg (y la propia serie) recuerdan, en algunos sentidos, el modelo aplicado por Ed McBain.