Nebridio de Egara

San Nebridio (en latín: Nebridius; catalán: Nebridi; final del siglo V circa 545), también conocido como Nebridio de Egara (Nigridius en latín), fue un sacerdote católico hispano visigodo, obispo de Egara (actual Tarrasa) al menos entre 516 y 527), persona notable y venerada que vivió en un período de reconstrucción tras las Invasiones germánicas en la península ibérica.

[4]​ Como sucesor suyo, aunque no inmediato, Nebridio participó en el Concilio de Tarragona de 516, en cuyas actas firmó "Nibridius minimus sacerdotum, Sanct Ecclesia Egarensis minister" en último lugar por orden de antigüedad, lo que indica que hacía poco que había sido consagrado obispo; también asistió al Concilio de Gerona de 517 y, junto con su hermano Justo, al II Concilio de Toledo de 527 que reclamó los derechos metropolitanos del obispo toledano, aunque éste fue concilio provincial.

Debió morir antes del 546, pues en el concilio de Lérida de este año la diócesis egarense estuvo ya representada por el obispo Tauro.

Isidoro dijo que fue escritor eclesiástico, pero su obra no se conserva.

Venerado como santo, figura así en todos los documentos posteriores, como en santorales y libros litúrgicos visigóticos, aunque no se sabe nada de su canonización: su culto desapareció después del Concilio de Trento.