Napier-Railton
El Napier-Railton es un automóvil británico propulsado por un motor aeronáutico, ideado para batir récords de velocidad.Esta marca se mantiene a perpetuidad, ya que el circuito fue ocupado con fines militares durante la Segunda Guerra Mundial, y nunca ha vuelto a ser usado como pista de carreras nuevamente.La caja de cambios no sincronizada (caracterizada por los horribles ruidos causados por un accionamiento incorrecto) tiene 3 relaciones.Aunque era capaz de alcanzar 168 millas por hora (270,4 km/h), el automóvil solo cuenta con frenos en las ruedas traseras.[2] Entre los propietarios de posguerra del automóvil figuran Patrick Lindsay y Victor Gauntlett.