El Museo está situado en el corazón de un lugar con riqueza paleontológica y cultural.
En el año 2015, fueron encontradas las primeras huellas fosilizadas de un gran tigre dientes de sable, las cuales eran únicas en el mundo, y fueron bautizadas como Felipeda miramarensis.
Este hallazgo llamo la atención de la comunidad científica internacional, por lo cual, las autoridades municipales junto a la Fundación de Historia Natural Félix de Azara, proyectaron un nuevo museo dedicado exclusivamente a las ciencias naturales, trasladándolo a su nueva ubicación.
Posee varias piezas únicas en el mundo, tanto en paleontologia, arqueología y zoología.
Entre la fauna podemos nombrar Perezosos terrestres, Glyptodon, Mastodontes, Dientes de sable, Toxodon y antecesores de los caballos y camélidos modernos entre otros.