Muerte civil

En la práctica, era el equivalente al destierro, ya que la ciudad dejaba de proteger a la persona condenada y cualquiera podía causarle daño impunemente, lo que les conducía a su muerte.

Los enfermos de lepra podían ser considerados como civilmente muertos.

Pero, en este caso, no era una sanción, sino una resolución a efectos legales, en beneficio de los herederos.

El decreto nazi «Noche y niebla» (decreto Nacht und Nebel) y los casos de desaparición forzada, llevaban implícita la pérdida de todos los derechos civiles.

Entre otras, porque sus efectos eran padecidos no solo por el muerto civil, sino también por su cónyuge y sus hijos.

Jacobo Estuardo , pretendiente a la corona de Inglaterra , fue condenado a la muerte civil por el Parlamento inglés .