[1] Estaba dirigido por Empar Pineda e Ignacio Álvarez Dorronsoro.
Desde 1974 participó en la Asamblea de Cataluña,[2][3] pero tenía muy poco peso específico dentro Comisiones Obreras.
Hacia el 1990 se unió a la Liga Comunista Revolucionaria y en 1991 el MCC se fusionó con el MCPV de la Comunidad Valenciana y el MCIB de las Islas Baleares para crear Revolta,[5] organización que adoptó el independentismo y desde el que participaron en todas las iniciativas independentistas desde un punto de vista comunista.
Originalmente el MCC era un partido maoísta inspirado en la Revolución Cultural china,[6] pero desde 1981-82 la organización abandonó esta ideología para pasar al marxismo revolucionario y posteriormente a un marxismo más heterodoxo.
El partido también dio su apoyo a los movimientos sociales feministas, catalanistas, LGBT e insumisos[7] así como el derecho a la autodeterminación de Cataluña.