Antaño, fue un punto estratégico debido a que desde su cima se divisa gran parte de la comarca de Logroño.
Junto al monte tendría lugar la supuesta batalla de Clavijo en el año 844 en la que Ramiro I de Asturias vencería frente a Abderramán II gracias a la aparición del Apóstol Santiago.
En la historia eclesiástica riojana, el lugar es mencionado por el martirio del obispo Sancho de Funes en 1146.
Santificado, sus reliquias estuvieron conservadas durante mucho tiempo en el monasterio de San Prudencio de Monte Laturce hasta su traslado a la catedral de Calahorra.
En mayo de 1979, bajo los movimientos populares para la elección de una bandera para la comunidad, ondeó en lo alto del monte la que meses más tarde sería la bandera oficial de La Rioja.