Aunque su altura sea de apenas 1054 metros, desde su cima se tienen excelentes vistas de la zona central del Principado, pudiendo verse desde ella Oviedo por el norte y la sierra del Aramo por el sur.Según él este sería también el lugar en donde podríamos encontrar dos capillas medievales de origen templario, construidas sobre un conjunto tumular de origen megalítico, en donde se desarrolló un culto a la diosa madre y que fue utilizada por Toribio para esconder las reliquias que traía consigo.Según Cimadevilla, los caballeros templarios pudieron llevar a cabo excavaciones en este lugar en busca del Arca Santa y los manuscritos secretos del Rey Salomón.Hay diversas rutas para su ascenso: por ejemplo, desde el sur desde el área recreativa de Viapará (en la subida al Angliru, en el concejo de Riosa), o desde el norte -mucho más dura, pero la más usada- desde La Collada, desde la que empieza una pista que lleva a las dos capillas.[2][3][4] Se puede subir hasta la misma cima por una pista de piedrecillas sueltas y barro, aunque las pendientes que suele alcanzar son de hasta el 35 % con tramos de 100 metros al 28 %, por lo que ningún medio con ruedas puede ascender.
El macizo desde el
Angliru
(
Oviedo
es visible encima, a la izquierda)