Monasterio de San Pedro de Eslonza

Urraca, daría al monasterio de Eslonza numerosas donaciones.

En el siglo XVI, a partir de 1547, se emprendió una reforma del edificio monacal, al hallarse en ruinoso estado.

[2]​ Vendido en pública subasta por 40 000 reales, fue pasando de mano en mano y vendido pieza a pieza, sufriendo saqueos constantes y la pérdida de su patrimonio artístico.

Esta aniquiladora ruina no se vio afectada por la declaración en 1931 como Monumento Histórico-Artístico Nacional.

Lo mejor que les pudo ocurrir fue el traslado: parte de su patrimonio fue en alguna medida disperso.

Las primeras referencias sobre este lugar aparecen en la segunda mitad del siglo XI.

En el siglo XII se puede encontrar una importante referencia sobre el lugar en tres donaciones llevadas a cabo al monasterio de Eslonza en los años 1179, 1181 y 1201.

En su iglesia de la Asunción se destaca en los capiteles una decoración escultórica especial con hojas angulares rematadas con grandes bolas.

El papa Urbano III confirmó mediante una bula los privilegios y exenciones recibidos.

Las portadas del monasterio de Eslonza y otros elementos fueron integrados en la nueva construcción.

El retablo mayor, el reloj, las campanas, el púlpito y el coro se encuentran en el pueblo de Villamañán, donde pueden ser contemplados.

Antigua portada renacentista, hoy en la Iglesia de San Juan y San Pedro de Renueva , en León
Portada barroca (1711), hoy en la fachada de la Iglesia de San Juan y San Pedro de Renueva , en León.