[1] En 1455 Enrique IV mandó construir en la finca "El Campillo" un palacio de recreo.En ella destacan los escudos del rey Enrique IV, que lo mandó construir.La decoración está basada en estrellas y lazos, colgando del centro racimos de piñas mozárabes.El lado de la Epístola está cubierto por un retablo con un calvario flamenco con esculturas policromadas.[1] El actual edificio monacal fue en origen casa de recreo del rey.En su fachada hubo un gran arco adovelado y trece huecos en la planta alta.En la planta baja hay techos mudéjares con decoración de lazo, chillas labradas y doradas.Los coros de la clausura obligaron a que se construyera un nuevo acceso.La nave está cubierta por bóvedas barrocas, construidas en 1730 que sustituyeron a la antigua armadura de madera.[2] Al lado este del claustro se ubican dos sacristías y la sala capitular.La entrada desde el claustro se realiza mediante una portada gótica justo debajo del campanario.[2] Se realizó este claustro para una pequeña comunidad de frailes que permaneció junto a las Clarisas.