Molécula anfifílica

[1]​ Así, por ejemplo, cualquier tipo de aceite es hidrófobo porque no puede incorporarse al agua.Un ejemplo sencillo de biomolécula anfifílica que tiende a formar micelas es la sal sódica del ácido oleico.El triglicérido, a diferencia del fosfolípido, no tiene el grupo fosfato que es el que, precisamente, le confiere esa característica anfipática En una molécula no polar los electrones compartidos están igualmente atraídos por los dos átomos.La fuerza de estas interacciones no se debe a ninguna atracción intrínseca entre las partes apolares.Cuando se agita una mezcla de agua y ácido oleico en su forma COOH, el resultado es una suspensión blanca y turbia que dura tan solo unos minutos antes de volver a separarse en las dos fases originales.Esa suspensión consta de partículas esféricas, llamadas micelas, las cuales se forman por efectos hidrofóbicos.[2]​ Hay varios tipos de materiales lípídicos anfipáticos que pueden mezclarse con agua en condiciones específicas para formar liposomas.Dicho avance se logró gracias a las investigaciones de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Los fosfolípidos tienen un comportamiento anfipático.
Estructura de una micela
Estructura de una micela