Miquel Badia

En 1925 participó en un atentado frustrado contra Alfonso XIII, el complot del Garraf.

Durante el mismo periodo (1933-1934) organizó las milicias paramilitares de las JEREC, los "escamots".

[2]​[3]​[4]​ Por su propensión a la violencia y sus actitudes chulescas fue apodado el "Capità Collons".

Desde ese cargo institucional fue cómplice del pistolerismo antisindical utilizando la violencia contra los sindicatos y permitiendo también el uso de la misma por parte de la patronal nacionalista catalana.

El presidente del tribunal fue golpeado y los policías se llevaron detenido al fiscal que mantenía la acusación, Manuel Sancho.

[11]​ El asesinato fue investigado por los periodistas Josep Maria Planes y Avel·lí Artís-Gener «Tísner».