[5] Este edificio ya había sido sede del Departamento entre 2000 y 2004, cuando tuvo que ser desalojado por problemas ambientales.[6] Con anterioridad al año 2000 y mientras estuvo inhabitable la actual sede, los principales servicios del Ministerio estaban en el Palacio de Santa Cruz, sede del Departamento desde 1901 y que hoy sigue hospedando una pequeña parte de los servicios centrales.[10] Esto hizo que para el año 1500 la Monarquía española tuviera un servicio exterior permanente y repartido por las principales potencias europeas —el más extenso de su época—, que se verá fortalecido durante los reinados de Carlos I y Felipe II debido a la necesidad de proteger los intereses del Imperio.En este acto se considera que nacen las relaciones internacionales como las conocemos hoy en día, estableciendo un nuevo orden en Europa basado en el concepto de soberanía nacional.Los embajadores ya existían y poco a poco fueron reforzando sus funciones, situándose como piezas esenciales de la política exterior, una política exterior estrechamente controlada por la Corona.Durante el reinado de Felipe V, en 1705 se divide la Secretaría del Despacho Universal, dando lugar a una Secretaría para asuntos de Guerra y Hacienda y otra «para todo lo demás».[17] En esta época y hasta finales de 1719, la Secretaría tuvo limitada su capacidad decisoria por la presencia en la Corte del religioso parmesano Giulio Alberoni, quien tuvo gran influencia sobre el rey, llegando a opacar al propio Grimaldo y al resto de ministros, pues él era quien tomaba las decisiones.[21] Tal fue el aumento de los negocios de esta Secretaría del Despacho que, reinando Fernando VI, en 1754 fue necesario aprobar un real decreto que recopilara y sistematizara sus competencias.Durante el mencionado conflicto civil, cada bando organizó sus propios servicios de relaciones exteriores.[44] En el caso del bando sublevado, en enero de 1938 se aprobó una ley que renombró el Departamento como Ministerio de Asuntos Exteriores, y lo volvió a dividir en secciones: Política Exterior, Tratados Internacionales; Relaciones con la Santa Sede; y Protocolo.[47] Precisamente, entre 1942 y 1945 se llevan a cabo una serie de reformas que establecen la Dirección General como órgano base del Ministerio.[49] Asimismo, se recogen otros órganos adscritos relevantes como son la Oficina de Información Diplomática (OID) o la Asesoría Jurídica Internacional.Asimismo, se adscribe a ésta la Dirección General para Asuntos de Norteamérica, Medio y Extremo Oriente.[50] Por otra parte, la Dirección General de Régimen Interior adquiere su actual denominación, «del Servicio Exterior».[53] Durante la transición democrática, el Ministerio fue una institución fundamental, pues se encargó de trasmitir al mundo el cambio político que la sociedad española estaba llevando a cabo y se centró en promover relaciones diplomáticas con Iberoamérica y otras regiones prioritarias para la política exterior española.Durante los años 1979 y 1981, las responsabilidades en asuntos exteriores fueron compartidas entre el ministro de Exteriores y el ministro para las Relaciones con las Comunidades Europeas (este último, centrado básicamente en las negociaciones para la adhesión).Tras 1981, ambos cargos se refundieron y se creó en el Ministerio la Secretaría de Estado para las Relaciones con las Comunidades Europeas (desde los años 1990, Secretaría de Estado para la Unión Europea, SEUE).Estas, junto con la SEUE, han sido los tres (o cuatro cuando se han separado cooperación internacional e Iberoamérica) pilares en los que se ha sostenido el ministro para el ejercicio de sus competencias.En tiempos más recientes, en el año 2000 el Ministerio trasladó su sede al palacio situado en la Plaza del Marqués de Salamanca, un complejo de 50.455 metros cuadrados que se tuvo que abandonar en el año 2004 al detectarse problemas ambientales que hacían imposible su ocupación.[58] En 2016[59] el gobierno aprobó la reforma de la antigua sede ministerial, planeando volver a esta en 2020.[68] En 2018, con un objetivo similar a la anterior ocasión, el departamento se renombró como Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, para enfatizar la vocación europeísta de España.Entre 1714 y 1901, las primeras oficinas de la Primera Secretaría de Estado, popular y despectivamente llamadas covachuelas, estuvieron ubicadas en los sótanos del Real Alcázar hasta que un incendió lo arrasó.[35] Este palacio había hospedado previamente otras dependencias gubernamentales, entre ellas una cárcel y el Ministerio de Ultramar.Cuatro años después, se ordena abandonarlo tras no ser habitable, volviendo a Santa Cruz, aunque debido al tamaño de los servicios del Departamento la gran mayoría tuvieron que reubicarse temporalmente en las Torres Ágora.Asimismo, le corresponde prestar asistencia y protección y facilitar el ejercicio de sus derechos a los españoles en el exterior, prestar asistencia a las empresas españolas en el exterior, así como ejercer todas aquellas competencias que le atribuya la mencionada ley y la normativa vigente.El personal del Servicio Exterior recibe formación continuada en la Escuela Diplomática.[74] Con el objetivo de potenciar la cooperación entre España y las diferentes sociedades y culturas del globo, la Administración General del Estado posee un conjunto de consorcios públicos, llamados Casas, que canalizan este objetivo.
Retrato de
José de Grimaldo
, primer secretario del Despacho de Estado entre 1714 y 1724.
Organigrama del Ministerio (hasta dirección general). Abril de 2022.
Palacio de Santa Cruz
, sede del Ministerio entre 1901 y 2000, y entre 2004 y 2021. Actualmente, aunque no la principal, sigue siendo sede del Departamento.