Había militado desde muy joven en las filas de la Unión Cívica Radical y por su carisma, rápidamente, asumió responsabilidades en la organización partidaria, siendo elegido presidente del Comité Provincia del Partido y senador provincial durante la gobernación de José Graciano Sortheix entre 1928-1930.Los radicales tucumanos desobedecieron las directivas del Comité Nacional y luego de un plebiscito interno entre sus afiliados se presentaron en las elecciones provinciales convocadas en 1934.Campero triunfó sobre las fuerzas de la Concordancia y los radicales anti-personalistas locales, quienes llevaron como candidato a Eudoro Aráoz.Durante la segunda gobernación de Campero, (1934-1938), Miguel Critto se fue elegido diputado nacional, incorporándose al Congreso Nacional donde actuó en consonancia con la bancada radical que permanecía en la Cámara de Diputados.Esta crítica consideraba que esta situación fortalecía la presencia de los industriales azucareros, -principalmente del senador nacional, Manuel García Fernández y del diputado Ramón Paz Posse- como actores con poder de decisión sobre el radicalismo concurrencista tucumano.«Agua y Caminos» fue el lema elegido por Critto para sintetizar su visión de gobierno.Durante su administración se habilitó el camino a los Valles Calchaquíes, dando impulso al turismo en Tafí del Valle y en San Javier, en donde se inauguró la moderna hostería que actualmente continúa funcionando.Comité Nacional, que reclamaba la representación histórica e institucional del partido en Tucumán, la U.C.R.Las elecciones arrojaron un resultado, que si bien favorecía a Campero en número de votos, en el Colegio Electoral, las fuerzas radicales concertadas para votar al candidato radical, estaban en franca paridad frente a los electores del candidato conservador Adolfo Piossek.Miguel Critto continuó militando en la Unión Cívica Radical siendo una de sus figuras más respetadas.
El gobernador Miguel Critto supervisa las obras de construcción del camino a los Valles Calchaquíes. Año 1940.