Miguel Casiri

[1]​ Estuvo en Oriente con Joseph Simon Asseman, autor de la Bibliotheca Orientalis.

Al año siguiente, y gracias a un favorabilísimo informe del erudito ilustrado padre benedictino Martín Sarmiento, pasó a la Biblioteca de El Escorial para formar el catálogo de códices árabes, en lo que fue ayudado por Manuel Martínez Pingarrón y el hebraísta José Rodríguez de Castro (1739 - 1789); la obra, patrocinada por Mayáns, fue publicada por Antonio Pérez de Soto, impresor madrileño que entre 1760 y 1775 realizó las primeras obras de tipografía del alifato en el arabismo español.

Aunque el trabajo de Casiri todavía no ha quedado obsoleto, un sistema más científico ha sido adoptado por Hartwig Derenbourg en su incompleto tratado Les Manuscrits arabes de l'Escorial (París, 1884).

Casiri formó a una primera generación de arabistas españoles, entre los cuales destacan en especial el granadino Miguel Banqueri, el aragonés Ignacio de Asso del Río y el propio Pedro Rodríguez Campomanes, al que sus muchas otras tareas impidieron profundizar más en este tipo de estudios.

Al final de sus días no consiguió que se le concediera un auxiliar para revisar la Bibliotheca, ni tampoco una continuidad en su labor como arabista, aunque recomendó que le sucediera fray José Banqueri, su discípulo preferido y amigo personal de Campomanes.