Micromachismo

Para él se trata de un neomachismo, una redefinición de antiguos comportamientos androcéntricos, que en ciertos contextos del siglo XX en Occidente se consideran socialmente inaceptables, pero que los desean seguir practicando para afianzar o recuperar poder.

Esto responde en gran medida a las dificultades para operacionalizar estos comportamientos.

[13]​[14]​ Se critica tanto al término como a un uso inadecuado del mismo.

En 2014, un periódico digital español lanzó una iniciativa para recopilar situaciones que consideraban como micromachismos.

Sin embargo, varios lectores les acusaron de haber clasificado como micromachismos hechos que entendían como agresiones graves y se lanzaba el debate sobre si el término podría resultar una forma de restar importancia a algunas situaciones.