[3] El edificio religioso se encuentra abierto al público en general.
[1] En 1986 Miguel Abdalá Hamideh, un empresario palestino, donó su hogar a la comunidad musulmana en el Perú que vio afectada su imagen por las acciones del Conflicto árabe-israelí, paralelamente también para dar una apertura a refugiados palestinos que llegaban a Lima.
[1] La Asociación Islámica del Perú, que tomó el liderazgo de la mezquita, anunció entre las décadas del 2000 y 2010 que planeaba la construcción de una mezquita mucho más grande en el mismo distrito de Magdalena del Mar, pues la cantidad de fieles ya llegaba a dos mil, entre inmigrantes (refugiados y turistas del mundo islámico)[2] y peruanos conversos, la mayoría de ellos de la rama sunita.
[2] Su fachada no es exactamente similar a la de una mezquita asiática, por lo que varios no utilizan el término «masŷid» para definir al templo.
[3] Su interior tiene musalas separados para mujeres y hombres, llena de alfombras para la oración en dirección a La Meca en Arabia Saudita.