Fue nombrada en honor a Johann Elert Bode, quien la descubrió en 1774.
Se presume que la galaxia de Bode contiene aproximadamente 250 000 millones de estrellas, siendo ligeramente más pequeña que la Vía Láctea.
Bajo condiciones excepcionales y cielos verdaderamente obscuros en lugares remotos, lejos de la contaminación lumínica, puede advertirse a simple vista.
Su centro presenta un característico abultamiento que se ha explicado ya sea como consecuencia del choque con una galaxia vecina que produjo que nubes de gas y polvo interestelar se hayan comprimido, colapsándose para producir masivas estrellas de altas temperaturas, o debido a la existencia de un cuásar en su centro, con un agujero negro supermasivo que debilitado produjera un brillo menor a los cuásares, pero mayor a lo típico en núcleos de galaxias en espiral.
Existe evidencia que apoya esta última versión proporcionada por radiotelescopios que indican que el núcleo se caracteriza por ser pequeño y muy denso, del cual se emiten chorros de gas caliente a gran velocidad posiblemente generados por el campo magnético en torno al agujero negro.