[2] Además, albergan el rango de temperaturas idóneo para la vida tal y como la conocemos, así que se espera que la gran mayoría de exoplanetas habitados por formas de vida complejas en la galaxia pertenezcan a esta categoría o a psicroplanetas con temperaturas medias muy próximas a 0 °C (como Kepler-442b).
[1][3] En el sistema solar el único mesoplaneta es la Tierra, aunque Mercurio y Marte pueden alcanzar temperaturas propias de estos planetas en determinadas regiones, en ciertas épocas del año y en momentos específicos del día; si bien su media térmica los situaría en otras categorías si fuesen habitables (hipertermoplaneta e hipopsicroplaneta, respectivamente).
Pueden ser planetas terrestres o gigantes gaseosos (si su densidad estimada difiere de la real), registrar un efecto invernadero descontrolado similar al de Venus si han perdido gran parte de su hidrógeno primigenio por escape hidrodinámico (algo que podría ser común en mesoplanetas anclados por marea a sus estrellas, como consecuencia de la pertenencia a una enana roja o naranja de tipo K-tardío),[5] haber sufrido una glaciación global permanente fruto de una extensión retroalimentativa de sus casquetes polares (un escenario factible en cuerpos planetarios con temperaturas medias próximas a los 0 °C),[6] ser planetas desiertos o estériles, contar con una vegetación que adopte mayoritariamente un tono poco común en la Tierra y que confiera un color distinto a sus masas continentales vistas desde el espacio (como el rojo, amarillo, naranja o negro; en función del tipo de estrella a la que orbiten),[7] tener una alta excentricidad que suponga drásticas variaciones térmicas entre el periastro y el apoastro,[8] etc.
[11] La Tierra, el único mesoplaneta del sistema solar (con una temperatura media de 14 °C), tiene un HZD de -0,5 (ligeramente desviado hacia el confín interno), por lo que los mesoplanetas registrarán mayoritariamente valores similares.
[10] Actualmente, los expertos estudian el potencial para la vida de los nuevos hallazgos exoplanetarios en función del único referente conocido: La Tierra.