Además, Alfonso XI contaba con sus tíos los infantes Pedro y Juan como tutores.
Este último nombraría, en 1322, gobernadora de Segovia a Mencía del Águila, mujer que era descrita en ese momento por Colmenares como: viuda noble y rica y ambiciosa, con hijos, yernos y parientes, que todo lo gobernaban a su antojo.Durante su gobierno de la ciudad se produjeron enfrentamientos conocidos como alborotos entre los partidarios de don Juan Manuel y los del infante Felipe de Castilla.
Asimismo, durante su gobierno, fue incendiada la iglesia de San Martín, arruinándose su torre.
[1] Su gobierno finalizó con la entrada en la ciudad de las tropas del infante Felipe, que detuvieron a los familiares de doña Mencía y confiscaron las propiedades familiares.
Tras esto fue arrestado junto a otras 17 personas, siendo sus bienes embargados pero recibiendo clemencia.