Mediatización y secularización

La Reichsdeputationshauptschluss fue ratificada unánimemente por la Dieta Imperial en marzo de 1803 y aprobada por el emperador Francisco II al mes siguiente.La corrupción endémica y la decadencia de estos pastores espirituales llevaron a la Reforma protestante.El emperador del Sacro Imperio se vio en el deber de compensar a los señores que, por causa del tratado con la victoriosa Francia revolucionaria, se habían quedado sin Estados propios y habían perdido sus tierras, proporcionándoles nuevos estados.Se decidió que las monarquías mediatizadas, las ciudades imperiales libres y los estados secularizados no serían restaurados, pero a cambio sus títulos nobiliarios mantendrían sus estatus idénticos al de las monarquías reinantes y, además, podrían recibir compensaciones por sus posesiones perdidas.Sin embargo, muchos de los monarcas mediatizados nunca recibieron la supuesta deuda porque se dejó a la (mala) voluntad de las monarquías reinantes la ejecución del pago, sin que hubiera una autoridad que pudiera imponer el cumplimiento del pacto.La mediatización transfirió la soberanía de los pequeños estados seculares hacia sus vecinos más grandes y poderosos.Aunque nunca participaron en una elección imperial (el Sacro Imperio fue abolido antes, en 1806), el título se mantuvo por cuestión de prestigio y preeminencia nobiliaria.Por último, la Reichsdeputationshauptschluss fue también un factor determinante para la disolución del Sacro Imperio Romano Germánico en 1806.
Mapa del Sacro Imperio Romano Germánico en 1789, que muestra una gran variedad de pequeños estados.