Maulets (historia)

[2]​ En las batallas utilizaban como distintivo el sonido de un cuerno rugoso (Charonia nodifera), el caracol marino más grande del Mediterráneo.

Como consecuencia, el rey concedió a la nobleza local todos los derechos sobre las tierras que hasta el momento eran cultivadas por la población expulsada.

Con este permiso los nobles impusieron a la nueva población cristiana particiones de tierras y cuantiosos impuestos.

Fue entonces cuando empezaron a cuestionarse los elevados impuestos que reducían considerablemente sus beneficios, e intentaron acabar con este sistema tanto por medios legales como violentos.

Así, cuando Juan Bautista Basset desembarcó en Altea en agosto de 1705, la rebelión se extendió con facilidad por la región.

Basset alcanzó Valencia vía Altea, Denia, Gandía y Alcira, sin encontrar oposición a sus tropas.

Así, el virrey, el duque de Gandía y otros nobles y botiflers empezaron a huir a Castilla, ya que no confiaban en la resistencia de la capital del reino.

A la vez, se restablecieron las relaciones con las Potencias Marítimas, partidarias del candidato austriaco, retomando el comercio con estas.

Basset pasó a arrestar y confiscar los bienes de los botiflers más importantes.

Sin embargo, las protestas cesaron esperando que el archiduque Carlos liberara a Basset al llegar a Valencia, ya que una rebelión contra las tropas austracistas y con el ejército borbónico amenazando de invadir el reino habría sido contraproducente.

El archiduque Carlos pidió a las autoridades valencianas que reclamaran el pago de las tasas, pero no tuvo demasiado éxito.

[7]​ Tras esta nueva derrota Carlos se retiró a Barcelona junto al virrey, los miembros de la administración y las tropas restantes.

[8]​ El ejército borbónico avanzó hacia Tortosa ocupando las ciudades a su paso que restaban en manos de los maulets.

Así, fueron tomadas y saqueadas ciudades como Gandía, Alcira, Denia, Alcoy, Alicante, Játiva o Villarreal.

Tras esta nueva derrota, los maulets acabaron por huir a Cataluña, donde aún resistían los austracistas, con la intención de proseguir la lucha.

Los supervivientes que no pudieron huir a Mallorca fueron arrestados y hechos prisioneros.

Retrato de Felipe V boca abajo que se encuentra en la Casa de la Enseñanza, el Museo de Bellas Artes de Játiva.
La muerte sin descendencia de Carlos II de España provocó el enfrentamiento.
Retrato del archiduque Carlos de Austria.
Detalle de la Batalla de Almansa , óleo de Buonaventura Ligli , Museo del Prado .