De ese matrimonio nace María Lola, una chica hermosa pero lisiada que ayuda a su madre lavando ropa ajena para mantenerse.
Un día, María Lola es atropellada por un automóvil conducido por Sergio Laresgoitia; tras las disculpas por parte de él, ambos se hacen amigos.
Margarita fallece y Sergio paga todos los gastos del funeral sin saber que la occisa era su tía.
Posteriormente, María Lola se casa con Fernando, pero éste la abandona la misma noche de bodas para irse con Imelda.
La operación es un éxito y Fernando, al verla sana, no solo se niega a divorciarse de ella, sino que le exige vida marital.