[1] Una de las marcas tipográficas más conocidas es la del delfín y el ancla, utilizada por primera vez en 1502 por el impresor veneciano Aldo Manuzio.
Se desarrolló durante los siglos XV al XVIII en Europa, especialmente en las imprentas de Alemania, España, Francia, Italia, Países Bajos y Portugal.
[2] Actualmente son un elemento decorativo, artístico y tradicional de la tipografía.
Una imprenta podía tener varios símbolos diferentes o con variantes.
Son elementos importantes para comprender la historia de los libros.