Tras estudiar el bachillerato con los Escolapios, se licenció en Derecho por la Universidad de Zaragoza, y se doctoró en la Universidad de Madrid, en 1892.
Tras esta crisis, Marraco creyó ver clara la existencia de dos regionalismos difícilmente compatibles, uno de derechas y otro de izquierdas, y su opción fue el acercamiento cada vez más rotundo al republicanismo representado por el radical Alejandro Lerroux.
Reflejo de esa misma orientación, en Zaragoza se constituyó un Directorio republicano que englobó a las distintas organizaciones republicanas aragonesas y del que fue presidente Marraco.
En noviembre de 1920 y como indicativo de que su relación política con Lerroux estaba plenamente consolidada, participó en el congreso celebrado en Madrid por la Democracia Republicana.
Durante el primer bienio republicano, en el que estuvo al frente del gobierno Manuel Azaña, se opuso a la elaboración y proclamación del Estatuto de Cataluña.