Manuel Lugrís

Su padre tenía un almacén de sal en el puerto, pero lo perdió por problemas administrativos, por lo que enseguida llegaron las dificultades económicas.Allí trabajó como contable en la firma Otamendi Amiel, formó parte del Centro Gallego desde 1884 y fue el director (y fundador) del primer periódico americano redactado íntegramente en lengua gallega A gaita galega (1885-1889), tras colaborar con El Eco de Galicia de Waldo Álvarez Ínsua, en el que su primera colaboración había sido un poema titulado «Nostalgia».Colaboró en A gaita gallega durante las primeras seis entregas pero, peleado con Ramón Armada, la dejó.En Cuba publicó «Soidades» (poesías prologadas por Curros Enríquez), la novela corta «O penedo do crime» y «A costureira da aldea», obra de teatro costumbrista que también se representó.Se relacionó con los regionalistas coruñeses, tomando parte en todas las actividades galleguistas del momento, como la Cova Céltica, junto con Murguía, Pondal y otros.En 1897 entró en la directiva de la Liga Gallega da Cruña, presidida por Salvador Golpe, como secretario.Al año siguiente se casó con Purificación González Varela, hermana del pintor y escritor regionalista Urbano González, con la que tendría otros cinco hijos, entre los que se encuentran Secundino y Urbano.Abandonado el teatro, retomó la poesía y escribió también numerosos relatos cortos, que reunió en 1909 en «Contos de Asieumedre».En 1919, como suplemento del periódico El Noroeste, publicó «Versos de loita», pero su mejor libro poético fue «Ardencias» (1927), que está dedicado a la juventud gallega.