Se licenció en Filología Clásica en la Universidad de Madrid en 1945.
Considerado como uno de los medievalistas más importantes del mundo, sus obras son referencia en los estudios de lenguas clásicas.
Era especialista en lengua y literatura latinas y en numerosos aspectos del mundo medieval (literatura, Cristianismo, Codicología o Paleografía, entre otros).
Entre sus discípulos figuran Santiago Jiménez, Fernando López Alsina, Carmen Codoñer Merino , Claudina Verdes o Mercedes Brea.
Escribió Index scriptorum latinorum medii aeui hispanorum (1959); Antología del latín vulgar, libro de texto en numerosos países de Latinoamérica; Libros y librerías en la Rioja Altomedioeval, obra premiada por el Patronado del Milenario de la lengua castellana, y Visiones del Más Allá en Galicia durante la Alta Edad Media (1985).